- ¡Diana, escúchame! No te he sido infiel, quien te dejó esa carta, debe haber sido alguien de la oficina que me tiene envidia.
- ¡No te creo!
¡Maldito mentiroso! – respondió furiosa.
Acto
seguido fue hacia su habitación cerrando con furia la puerta. Renato tocó
reiteradamente, pero ella no se inmutó. Le dolía el pecho, las lágrimas no cesaban.
Creyó por un instante que su marido le contaría la verdad, que sería honesto.
“Maldito cobarde. Haces tus mierdas y luego pones cara de inocente”, pensó
mientras abría la ventana.
Afuera, en
la calle, era una fiesta. Los autos pasaban uno tras otro, dejando a las
personas en los bares y discotecas. Era fin de semana. Ésto, hizo que recordara
sus años mozos, cuando salía con un joven esposo, que aún no era dueño de nada,
y que la amaba como nadie lo había hecho. De eso ya habían pasado veinte años.
La realidad era muy distinta ahora. Eran raras las veces que salían solos,
mayormente las cenas eran por los negocios de su marido. Y cuando ella quería salir
a divertirse, sólo lo hacía con sus amigas.
“Amiga,
¿por qué esta vez no vino Renato?” “Está cansado, ya sabes, el trabajo, las
cuentas” “Deberías animarlo a que salga con nosotras de vez en cuando” “La
próxima vez será” Pero, esas últimas palabras siempre terminaban en nada.
Ella confiaba
en él hasta ese día, cuando su traición se encontró con ella en la puerta de su
hogar. Unas fotos reveladoras que sostenía Daniel eran la prueba. “Es mi
pequeña venganza… es bueno saber la verdad. Decida entonces usted, qué hacer
con ellas” Diana no quiso, al principio, aceptarlo. Tragar la áspera realidad
que a empujones había entrado en su garganta formando el característico nudo. Cuando
llegó a su corazón ella por fin lloró.
Planeó
cómo esperaría al marido. En su habitación, en la sala. ¿Le entregaría las
fotos? O… quizás no diría nada. Esta última idea le rondó en la cabeza por
varios minutos y estuvo a punto de cometer ese error, sino hubiese sido por la
llamada de su amiga Claudia.
- ¿Aló?
¿Diana?... ¿Estás ahí?
- Sí,
amiga.
- Pues, ya estarás alistándote, ¿no?
- …
-¿Esta vez
irá Renato?
- Creo que
no voy a ir…
( comunidad PTB )